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Alfredo Tamayo Ayestarán (1924 2014) Abanderado Moral de las Víctimas de Eta - Deusto Knowledge Hub Explorer

Alfredo Tamayo Ayestarán (1924 2014)Abanderado moral de las víctimas de ETA Una vida al servicio de la verdad y la justicia de los más desprotegidosEltestimonl jesuita vasco Alfredo Tamayo Ayestarán falleció el martes en Loyola, a los 90 años de edad, dejando un testimonio de vida en servicio a la verdad y a la justicia de los más desprotegidos, en particular, de las víctimas del terrorismo. Él las abrazó frente al desamparo al que, como él mismo denunció, les sometió parte del clero vasco. Su rebelión intelectual frente al totalitarismo de ETA y la apatía social le convirtió en referente moral de las víctimas, cuya dignidad defendió en manifestaciones y en actos religiosos. Su obra intelectual de resistencia contra la barbarie etarra ha sido glosada en una selección de artículos publicados en el volumen «Siempre de vuestro lado».Tamayo, jesuita durante 73 años, ejerció el sacerdocio durante 59 años y desplegó una intensa labor intelectual. Fue doctor en Teología por la Universidad de Innsbruck y se doctoró también en Filosofía por la Complutense de Madrid. Admirado por sus alumnos, impartió clases en las facultades de San Sebastián de la Universidad del País Vasco y de Deusto, donde dirigió la Escuela de Teología durante 52 años. «Elaboró hasta este mismo curso el programa anual y siempre fue eco de las¿ni Alfredo Tamayo en la presentación de uno de sus librosJAIME GARCÍAinquietudes del momento. En su forma de encarar la realidad histórica aparece su visión de Jesús de Narazet y su apuesta por el hombre. Él supo dar esperanzas necesarias a una sociedad a veces deprimida y como sacerdote, fue un defensor exigente del derecho a la vida, de denuncia de la violencia y de aproximación a las víctimas», subraya JoséAlfredo Tamayo Ayestarán,nació el 24 de agosto de 1924 en San Sebastián y murió el 21 de octubre de 2104 en Loyola (Azpeitia). Era doctor en Teología y Filosofía y ejerció el sacerdocio durante 59 años. Su rebelión intelectual frente al totalitarismo de ETA y la apatía social le convirtió en referente moral de las víctimas del terrorismo.María Etxeberria. Este jesuita destaca a ABC su «búsqueda infatigable del diálogo entre la Iglesia y la Modernidad», desde una visión progresista.A pesar de llegar debilitado de su último viaje a Austria, el pasado verano, Tamayo se preocupó por cerrar el último programa de Teología, según relata Etxeberria, encargado de oficiar ayer la eucaristía por su memoria en la Basílica de Loyola. Al funeral acudieron representantes de Covite, que premió al jesuita donostiarra en 2012 por su cercanía con las víctimas.Precisamente, en ese acto el miembro de la Compañía de Jesús leyó una ponencia titulada «Cuarenta años de degradación moral», muy crítica con el ascenso social de «los amigos de ETA» a los ayuntamientos y la Diputación foral de Guipúzcoa. «Un pueblo que olvida a sus víctimas deja de existir como comunidad de seres humanos», afirmó durante un oficio ofrecido en memoria de Gregorio Ordóñez. «El País Vasco es un enfermo crónico que tardará años en curar», dejó dicho Tamayo, quien denunció la herencia perversa de ETA al haber «pervertido el sistema de valores» entre los vascos.«Hemos perdido a uno de nuestros mejores amigos, a todo un referente en la lucha contra el terrorismo y la deslegitimación de la violencia»,manifestó el colectivo de víctimas.ITZIAR REYERO

Itziar Reyero

2014-10-24T00:00:00

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