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La Reforma Interminable - Deusto Knowledge Hub Explorer

La reforma interminableEl sistema universitario acoge con desconcierto el nuevo cambio del sistema de titulacionesLas universidades se han dado dos años de tiempo para decidir si aplican o no el modelo de grados de tres cursos más dos de máster:: JAVIER GUILLENEA SAN SEBASTIÁN. El Gobierno central aprobó el pasado 30 de enero un real decreto que permite a las universidades reducir en un año la duración de sus grados y complementar la formación de los alumnos con dos años de máster. La reforma ha sembrado el desconcierto entre la comunidad universitaria, que aún no sabe si funciona su actual y todavía nuevo sistema, y ya tiene que pensar en otro aún más nuevo e implantado en países punteros que, a su vez, se están preguntando si su modelo es el adecuado. Todo sea a mayor gloria de la enseñanza, si es que alguien se pone de acuerdo sobre lo que significa la palabra o, al menos, sobre cómo llevarla a la práctica.Para salir de dudas en el mar de la ausencia del consenso educativo, los rectores de las universidades españolas han acordado por una gran mayoría aplicar una moratoria de dos años que les dé tiempo a decidir si aplican o no en sus aulas el 3+2 (grados de tres años más dos de máster). Antes de hacerlo quieren evaluar el modelo de grados de cuatro años más un máster que entró enfuncionamiento en 2010, después de un largo debate entre la comunidad educativa sobre cómo aplicar el proceso de Bolonia.La paradoja es que, durante aquellas discusiones, las universidades se mostraron a favor del modelo 3+2 pero finalmente se plegaron a las preferencias del Gobierno socialista, que defendía el 4+1. En el fondo, no es que los rectores estén en completo desacuerdo con el decreto de Wert. Lo que dicen es que, si se pone en marcha una reforma, hay que llevarla a cabo con todas las consecuencias. Quieren todo el tiempo del mundo para hallar la respuesta a sus preguntas, que son unas cuantas.Manuel Tello, catedrático de Física de la Materia Condensada; Luis Lizasoain, profesor de Métodos de Investigación de la Facultad de Pedagogía (ambos de la UPV/EHU), y Guillermo Dorronsoro, decano de Deusto Business School, tratan de contestar a algunas de esas preguntas en estas líneas.Regreso al pasado. El decreto permite a las universidades reducir la duración de los grados de cuatro a tres años, para adaptarse al modelo 3+2. Este sistema es opcional y coexistirá con la actual fórmula de 4+1. Para Luis Lizasoain, el 3+2 supondrá un regreso al pasado, a los tiempos en los que la enseñanza superior «se dividía en estudios de ciclo corto, como las diplomaturas de Magisterio y Enfermería, y los de ciclo largo». «Hemos hecho un viaje paraquedarnos donde estábamos hace años, se vuelve al esquema de carreras cortas y largas», corrobora Guillermo Dorronsoro.Tiempo para evaluar. Luis Lizasoain, que fue decano de la Facultad de Pedagogía, ha vivido tantas reformas educativas que ya está «harto». «Es una locura hacer un cambio más sin haber evaluando el modelo anterior, se va a crear un enorme desorden en las comunidades autónomas y entre los estudiantes», se queja. Guillermo Dorronsoro considera positivo que «se dé a las universidades la posibilidad de elegir y que los estudios superiores españoles se homogeinicen con los europeos. Pero sostiene que la reforma «llega cuando la anterior aún no está rodada». «Lo que piden las universidades es consolidar el anterior sistema y ver sus ventajas e inconveniente. Aún no tenemos calibrado el 4+1, no sabemos lo que encuentran las empresas que contratan a alumnos con cuatro años de formación», dice.Lo inevitable. Todos consideran que la aplicación del 3+2 va a ser inevitable. Cuando se ponga en marcha convivirán en la misma facultad alumnos de diferentes modelos. Y los de ahora ya empiezan a sentirse agraviados. «Hoy hemos estado hablando de esto en clase. Cuando se aplique, los que estén en segundo con el 4+1 se graduarán a la vez que los que empiecen en primero con el nuevo sistema. Eso no les parece justo porque van a competir en el mercado laboral en las mismas condiciones con gente con un año menos de estudios», explica Luis Lizasoain.¿Se aprende lo mismo Los estudiantes ya no solo van a tener que pensar en la carrera que van elegir sino también en los años de duración, y una de las grandes dudas a las que se enfrentarán es si en tres cursos se aprende lo mismo que en cuatro.LAS FRASESManuel Tello Catedrático de Física (UPV)«El chaval que lo merezca no puede dejar de estudiar por razones económicas»Guillermo Dorronsoro Deusto Business School«Las empresas europeas contratan a titulados de cuatro o cinco años»oLuis LizasoainProfesor Pedagogía (UPV)«Con grados de tres años de duración no se puede aprender lo mismo»«No se aprende lo mismo», afirma tajante Manuel Tello, que recuerda que con la anterior reforma «se comprimieron las materias de cinco años en cuatro y cada uno presionó para meter la suya de cualquier forma». A pesar de todo, resta importancia a la duración de la carrera. «No es un escándalo tener grados de tres años, lo que hay que discutir es qué queremos lograr en ese tiempo. ¿Queremos dos años de formación básica muy fuerte y uno de formación aplicada o al revés », se pregunta. «En tres años no se puede aprender lo mismo. Se puede hacer un destilado muy fino de contenidos, pero en su tiempo ya se redujeron bastante», asegura Luis Lizasoain. Eliminar un curso supone restar 60 créditos a los estudios de grado, lo que significa, afirma el profesor, «muchas menos horas de docencia». Es algo que se notará en estudios como Magisterio, que en la actualidad tienen tres años de docenV cia y uno de prácticas. «Con el 3+2 los futuros profesores se pueden quedar con solo dos años de formación, y esto es muyjustito».Mercado laboral. El minis tro de Educación, José Ignacio Wert, sostiene en defensa de la reforma que los jóvenes graduados saldrán antes al mercado laboral. Guillermo Do-rronsoro, que está en estrecho contacto con el mundo empresarial, asegura que este argumento es falso. «Hemos hablado con empresas de Europa y nos dicen que se llevan a los titulados de cuatro o cinco años. Con grados de tres cursos sales al mercado laboral menos formado y los empleadores prefieren que los jóvenes estén más tiempo en la universidad».Dos tipos de alumnos. Los títulos de tres años corren el riesgo de convertirse en una especie de diploma menor y es muy posible que se instaure la percepción de que quien no cuenta con un máster no tiene sus estudios cumplidos. El peligro es que surjan dos tipos de alumnos: los graduados y el resto.Para Manuel Tello, esta distinción no es novedosa porque «las opciones de varios años han existido siempre». «Ahora también se puede hacer un 4+2. Cada uno puede estudiar los másteres que quiera, aunque habrá alumnos que por razones económicas no podrán continuar, que es algo que no debe ocurrir jamás. Si se aplica el 3+2 -añadehay que lograr que el chaval que se lo merezca no deje de estudiar por razones económicas».No opina lo mismo Luis Lizasoain, quien sostiene que los antiguos modelos «de diplomados y licenciados se van a reproducir, aunque con la diferencia de que los estudios de estos últimos van a ser notablemente más caros». «Puede ocurrir -sostiene Guillermo Dorronsoroque haya dos tipos de alumnos, los que pueden pagar y los que no, y eso no ayuda a la apuesta por la cohesión social y la igualdad».La necesidad de un máster. El ministro Wert asegura que los grados de tres años representarán un ahorro para las familias, que deberán pagar un curso menos. También afirma que solo un 20% de los graduados opta en la actualidad por cursar un máster y que esta situación no parece que vaya a cambiar.Aquí surge de nuevo la cuestión de si tres años son suficientes y a qué profesiones da acceso un grado de esa duración. No se sabe, por ejemplo, si para ser profesor de universidad bastará con estudiar tres cursos. Lo que parece evidente es que un máster ofrece una mayor capacitación profesional, al menos a los ojos de los empleadores. «Un máster va a ser necesario y eso encarecerá los estudios sí o sí», recalca Luis Lizasoain.Las tasas. «Los másteres son muchísimo más caros», insiste el profesor de la UPV. Según un estudio elaborado por el Observatorio del Sistema Universitario, los precios máximos de los másteres de España (4.000 euros) se encuentran entre los más caros de Europa y solo son superados por Eslovenia, Grecia, Hungría, Irlanda, Letonia, Lituania, Reino Unido y Chipre. En cuanto al precio mínimo, de poco menos de 1.500 euros, España solo son más caros los de los países antes mencionados, más Hungría y Lituania.Según el informe, en la mayoría de los países el precio máximo de los estudios de máster es el mismo que el de los estudios de grado. En un segundo grupo, formado por seis países, los precios de los estudios de máster son solo ligeramente superiores a los de grado. Los países donde los másteres son sustancialmente más caros que los de grado son Eslovenia, España, Grecia, Irlanda, Letonia y Chipre. En España, el precio máximo de un curso de máster es un 67% más caro que el máximo para un curso de grado.«Antes, pagar los estudios de cinco años era un reto para las familias, pero podían con ello. Ahora, con tres años de mil euros y mucho más para los másteres, el reto es mucho más difícil», afirma Guillermo Dorronsoro. A juicio de Manuel Tello, «si se regula el 3+2 es evidente que si hay becas para estudiar la diplomatura también tiene que haberlas para hacer un máster».Competencia. Si para diferenciarse de los grados será imprescindible hacer uno o dos másteres, para diferenciarse de los másteres habrá que elegirlos con cuidado. Guillermo Dorronsoro dice que, más allá del 4+1 y el 3+2, «los empleadores ven la calidad de la universidad», y eso puede aplicarse al universo que se extiende más allá de los grados. Porque puede ocurrir que ya no sirva cualquier máster, que haya que matricularse en los que marcan la diferencia por la calidad de los profesores o de las universidades. Y esos, claro está, son los más caros.Europa prefiere la fórmula 3+2El sistema 3+2 es similar al que funciona en otros países europeos, aunque con algunas diferencias. En Francia los cursos universitarios se organizan en torno a tres diplomas nacionales: la licenciatura, el máster y el doctorado. La licenciatura se prepara en seis semestres y una vez conseguida, da acceso a poder estudiar un máster, repartido en cuatro semestres. En Reino Unido, la duración de las carreras depende de la especialidad, ya que en algunos casos pueden durar tres años o hasta cinco o seis en Medicina. Tras la obtención del grado, los alumnos tienen opciones de hacer un máster, en general de un año, o doctorado.En Alemania, las universidades pueden elegir el tiempo de estudios reglamentario para los grados de licenciatura y máster, dentro de unos límites que están fijados por ley. La duración para el licenciado debe ser como mínimo de tres y como máximo de cuatro años

Javier Guillenea San Sebastián. El Go

2015-08-02T00:00:00

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